Dormí asida al relámpago,
Desperté con la muerte llorosa,
Había una sombra en mi garganta
Y la tarde vestida de ausencia
Creí que llegaba una caricia…
Pero el golpe fue cruel y en la boca
Rodó sanguinolenta, mi voz sin destino
Haciéndose lamento, al borde del alma
Una palabra profunda y misteriosa
Me sacó del letargo de horas grises,
Agonizaba el ave y vi morir al amor
En brazos de Perseo llorando a Medusa
Monica Ivulich
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Imagen: Google
Ale Barajas Wow no sé que decirte con este bonito poema, cada verso se teje de forma hermosa, me encantaron estas palabras..."Agonizaba el ave y vi morir al amor..." Muy lindo, gracias por compartirlo conmigo.
ResponderEliminarMaria Jose Lopez Perez Crei que llegaba una caricia... pero el golpe fue cruel... demasiado real. Es precioso Monica Ivulich, triste... pero muy bonito
Gioconda Esther Imparato Bravo por la expresión del alma!
Virginia Quiroga De excelencia amiga, bravo !!!
Carmen Hernández Rey Que preciosidad... Monica, ese despertar cruel.
Isabel Mendieta Rodríguez Es magnifico, pura tensión desde que te duermes con el relámpago... Porque es vivir el recorrido de tus letras... Gracias!!!! Por la experiencia!!!!!
Belen Merino Martinez Gris..oscuro , casi negro..rotundo.
Merlys Corpas Una obra de arte, una joya de la literatura,un poemazo, divino!!! Eres genial Monica.Beso
Doris Machado que largas se hacen las horas y notamos que no es el cielo el que es gris es el tiempo al que se le hace dïficil mantener el color
Liliana Tavío Aguilar Qué acuchillado sobresalto, qué dolor inesperado, todos los temores escondidos acudieron a la vez a ese convocar miedos...ufsss..