viernes, 30 de diciembre de 2016

Sin final

Árboles de cerezo por la noche
en Okazaki Aichi

miércoles, 28 de diciembre de 2016

domingo, 25 de diciembre de 2016

A veces

de la red
foto en Bosnia 2016 desde Pirámide

viernes, 9 de diciembre de 2016

Sin definición (poema)

Hoy no me defino
cambio con el viento, corro con el tiempo
Amanezco con las nubes rojas o
con briznas de cielo pegado a mi cabello,
las estrellas cantan o la lluvia ronronea
para dormirme en la memoria de una piel
y morir al amor, en la noche de la nada.

Hoy no me defino
Vivo en la libertad de la incertidumbre
persiguiendo cisnes de cristal, tan improbables.
No hay realidad a la que aferrarse
ni personalidad confiable que sustente un plan
no hay luz, no hay sueño, ni voces para seguir

Hoy no me defino
Desecho lo conocido
desdeño la ilusoria realidad o creencias
desprecio la felicidad prometida,
hoy anulo mi idea de ser yo
renuncio a la protección de cualquier clase
a cualquier sistema o compromiso
y al control sobre mí misma

Cabalgo sobre mi imprecisa libertad.
Anulo tiempo acreditado y relojes rutinarios.
Declaro huelga permanente a las melancolías
y un carnaval diario para mis alegrías…
de vez en cuando, recojo polvo de estrellas...
Hoy no tengo definición.

sábado, 26 de noviembre de 2016

Imagen de la red

miércoles, 23 de noviembre de 2016

martes, 8 de noviembre de 2016

Mis versos (poema)


Mis poemas tienen pocas cosas
Como mi vida
Algunos amores guardados en arcones de cartón y seda
¿Qué más?

No se puede poner muchas cosas en los poemas
solo algunas mariposas que revolotearon
y dejaron mi estómago como una nube de algodón
como un tambor sin resonar.

También les pongo alguna esperanza del amor remozado
de alegrías sin disimulo
de penas que disimulando se cuelan haciendo algarabía,
de vez en cuando, una ternura roja
llena de chocolatinas y dedos infantiles

Mis versos tienen hijos que no nombro
tienen nietos que juegan a la rayuela
Y aviones de colores que dibujan curvas en el cielo de mi poema

Mis versos tienen pocas cosas, casi nada
desde que decidí aceptar un amor imposible
desde que cerré la puerta y no sé cómo abrirla…
desde que soy una viajera de la ausencia.

En realidad, es poco lo que recuerdo para escribir mis poemas
Cuando observo en mi memoria,
veo pelusas del fondo de mi bolsa
y vasos de plástico con restos de champagne,
flores que se marchitaron después de sacar la foto,
luces de colores que no se encendieron
varias lunas, lluvias en París...
otoños en el pecho, soles en las miradas,
y algunas cicatrices que pocos saben ver.

Hoy te regalo mis aviones de colores
esos, que dibujan curvas en el cielo de mi poema.
Te regalo botellas con mensajes indescifrables,
las rocas que coleccioné en mis viajes y mezclé sin clasificar
te obsequio las sonrisas en tonos y paisajes variados
compiladas con mi cámara

todo envuelto para regalo dentro de mi poema.

                                                            D.R Mónica IvulichIt2016


A MI HIJA


Fuerte como el roble creciste,
bella, sutil, inocente y resuelta
eres aguerrida, feroz y sabia
sometida al sol, luna, lluvia y tierra

Eres a un tiempo y desde antes
niña salvaje y tierna mujer
de mil mundos y ninguno

Eres madre e hija, una loba
Compañera fiel de tu hombre
Solitaria de tu pena y alegría

Mi hija amiga, un gran ejemplo
de rectitud, sencillez y soporte

Eres la vida misma que continua
en ríos claros de ternura y valor.

Imagen de nuestra estirpe de
soñadoras de universos posibles,
tu sombra se yergue con temple
y tu alegría dona genio e ilusión
a tu entorno todo, y a tu progenie.

Que seas mi hija es una recompensa

una bendición, una ilusión realizada.

                                                                       MOM
                                                                       D.R.Monica IvulichFr.

lunes, 31 de octubre de 2016

Mis experiencias con brujas (prosa)

Mis experiencias con brujas
Imagen de la red

La primera:
Buenos Aires, 1987.

Mi visa no salía, mi viaje se demoraba… hoy sé que mi miedo a irme, el terror que nos da el apego, ponía obstáculos donde fuera, a pesar de mi determinación.

Alguien aconsejó: -ve a consultar a “fulana” que es buenísima, ella te dirá lo que necesitas saber, lee cartas y borra de café.

Lo que recuerdo de esa sesión: Que conocería a un señor con tres hijos, buen negocio y 42 años que sería el padre de mi nuevo hijo. Tenía que rezarle a San Epafrás, un santo desconocido para mí, pero -dijo- está en la Biblia, creo que era para purificarme, no sé.
No quedé nada contenta pues dijo que viaje, ese año, no. Pues fue al siguiente.
Imagen de la red


El caso que, unos días después, salía de trabajar, era noche tarde y esperaba el bus; un auto se detuvo un par de metros delante de mí y el señor se bajó y, sobre mi hombro a mis espaldas, farfulló algo que no entendí.
Me giré para encontrar una cara indescifrablemente oriental.
Supuse que quería una conquista o, a esa hora, confundió mi profesión. Entonces (no me pidan la razón) le pregunté, sin aquella timidez que me caracterizaba:

-         -         ¿Tiene 42 años?
-         _          No... -musitó con sorpresa
-         _         ¿Tiene un buen negocio?
-         _    No… pp… -balbuceó abriendo tanto los ojos que casi se hicieron occidentales.
-         _      ¿Tiene tres hijos?
-         _       Pues ¡no! -exclamó espantado
-         _       En ese caso, ¡no tenemos nada que ver Ud. y yo…!

Pobre hombre, dio media vuelta huyendo de esta loca que, girando sobre los talones, no podía parar de reír.

La segunda
Florida, 2005
Imagen de la red



Mi amiga “M” que vive allí me invitó a ir a un pueblo llamado Cassadega donde habitan toda clase de brujas-os de magia blanca.

Una vez en sus pacíficas calles me preguntó si deseaba que me leyeran las cartas, que alguien le había cambiado la vida y me la podría presentar.
Resumiendo:

No recuerdo todo lo que me dijo, excepto dos cosas: Mudanza a un lugar lejano, allende los mares y que ella veía un caballo, pero que no era importante tal vez no era mío o era del futuro o el pasado, otra vida, pero que lo veía detrás de mí.

En el 2006 me fui a Alemania por 6 meses y mi nieta Triny es apasionada por los caballos, le regalé uno de madera para Navidad (sin recordar aquel mencionado por la bruja)

En el 2008 mi hija me pidió que me mudara con ellos a Oxford y yo estaba muy reticente… mi vida en NY era intensa y… Esta vez sí reconocí el apego, que los años enseñan algo. 
Mientras medía las consecuencias fui a verla para su cumpleaños. Por un lado se inclinaba la balanza por el amor hacia ella y su familia, por ayudarla con sus tres nenas para que trabajara y estudiara. Por otro lado, estaba mi soledad bien ganada, mi gente, (como familia extendida y amada)

En eso estaba cuando un día en que ella tenía fiebre por un resfrío yo le subí su desayuno. Al abrir las cortinas vi que en el terreno de enfrente había un caballo… y me miró. Sin pensarlo le pregunté (si, al caballo ¡que bobería! me decía al mismo tiempo):
-         ¿Eres el caballo que mencionó la bruja?
Sorpresivamente el jamelgo relinchó y yo me estremecí. Con cosquillas en el estómago, le dije a mi hija: -Parece que me voy a mudar…

Imagen de la red
(La princesa que quiso ser bruja)

Dicen que también soy bruja y, tal vez haya algo de eso, lo cierto es que tengo varias amigas que lo son y, aun a las que no son amigas las respeto de corazón. Por eso hoy les deseo ¡MUY FELIZ DÍA de las BRUJAS!

                                                                                     Mónica Ivulich
                                                                                      DR2016Md

Necrológico del amor (poema)



Te amé detrás, en y fuera de zaguanes
Me amaste en las esquinas del laberinto azul
No hubo un hueco de mi suspiro
que tu aliento no recorriera
Renuncié a tener alguna salida
Mi corazón rodó por sucias mesas de apuestas
y por ilusiones de bancos de plazas
se deslizó por los paraguas y sombrillas desmembradas
arribó sin barco a todas las costas, para no encontrarte
Tú bordaste y pintaste muchas cruces oscuras
las colgaste en los balcones de ciudades abandonadas
las cosiste a los pliegues de enaguas y conciencias
escondiste otras en los cajones de un olvido asustado.
Nos buscamos en todos los rincones y seguimos buscando
vida tras vida nos seguiremos encontrando
y rechazándonos,
encerrando el amor dentro de los árboles
o debajo de las baldosas, para protegerlo,
en lugares inadmisibles de la indiferencia …
para conservarlo en celdas de pensamiento
en aforismos del terror
cayendo en azules abismos…
creando neologismos derivados del amor,
para llamarlo designio imposible

y clamar a las estrellas piedad...



Mónica Ivulich
DR2016Fr

Esas mujeres...


A. Mucha
Hay mujeres que aman en silencio
que no miden distancia por kilómetros
ni por pasos
sino la cercanía en abrazos y sonrisas.
Son esas mujeres que aman más allá
de lo que dicen,
pero entregan su intención, su pensamiento,
a un amor indiferente que no mira a sus ojos
que no sabe lo que se siente
Mujeres q no demuestran, que no piden
no saben reclamar, pero están dispuestas
a dar la piel por ese amor.

Mónica Ivulich
DRMd2016

jueves, 20 de octubre de 2016

ODA a la EDAD (Poema)


IMAGEN DE LA RED


Dicen que después de los sesenta y cinco
se olvida uno de nombres, fechas y gente
se le confunden los hechos y lugares
todo esto de forma indeterminada, arbitraria…

Ay! Señor… me opongo a que se destierren de la mente
las caricias inocentes de los niños, tantos en mi vida,
ni la ardilla que cortó un girasol frente a mi ventana
ni el beso que me robaste ni la noche aquella…

Creo que se deben eliminar los recuerdos amargos,
las miradas con malicia, las despedidas a destiempo,
el llanto sin respuesta, la palabra injusta, ingrata
como si fueran antiguas cartas del amor infiel.

Si, limpiaré de mi memoria todo lo desechable
de forma urgente quemaré recuerdos mustios
para dejar espacio solamente a lo luminoso
a mi risa loca que se une a otra y a otras más locas.

Desandaré pasos del ayer hacia ningún lado
silbaré melodías vetustas aún no inventadas
comeré lo que me han prohibido sin mi permiso
uniré mi mano a otras manos con o sin motivo
separaré aguas, abriendo fatuos caminos mágicos
me reiré de mis imperfecciones y mis miedos
acunaré mis dolores cada noche bajo luna llena
y, en una piel nueva, enterraré las injusticias viejas…

Plantaré albahaca y menta, jazmines y limones
para emborracharme de olores cada mañana
y sembraré versos en tu boca quitando sinsabores
borrando reproches, olvidando soledades seguras

Pintaré mi alcoba con reflejos de mar y vida fresca
tenderé banderines evocando victorias sobre mí misma
pondré música sin sentido, la locura será mi huésped
y, un día cualquiera, moriré en una explosión de vida.

Mónica Ivulich.

D.R.2016Fr.

Cortitos

Imagen de la web
Imagen de la web

jueves, 8 de septiembre de 2016

ESTA NOCHE (Poema)


Hoy no te invito a compartir insomnio
Mejor te quedas en tu almohada
y me dejas girar entre mis edredones
porque esta noche revivo nuestras noches

No, no te invito a compartir insomnio
que hoy se han infiltrado los recuerdos
y muchos sentimientos entre las sábanas.
tú a tu almohada, yo a matar nostalgias

                                                          Mónica Ivulich
                                                            DR2016Fr

Imagen de la red

domingo, 4 de septiembre de 2016

viernes, 2 de septiembre de 2016

domingo, 28 de agosto de 2016

breves e ilustrados

Imagen de la red
Foto propia (Italia 2016)


sábado, 27 de agosto de 2016

MIS AMORES (Poesía)

A mis amores los guardo muy bien,
los protejo de la lluvia y el viento,
del sol y las polillas del abandono…
mis amores me abrazan el corazón
me besan el pelo y susurran bajito
dándome amor, compañía, amparo.

En un rincón de mi recuerdo vigente
mis amores me sonríen y acarician
siempre presentes a la hora de latir

¡Ay! Mis amores, dulces consentidos,
agolpados en un pliegue del sentimiento
fantasmas que brincan en mi memoria
a veces desazón, otras, sonrisa y calidez
los llamo a recordar soles muy remotos


                                                                                              
Si, a mis amores los agasajo muy bien.

Mónica Ivulich DR2016Fr.

jueves, 18 de agosto de 2016

Ventana con lluvia retrospectiva


Llueve en mi ventana y miro tras el cristal, bebiendo té
Algo también llueve en mi pecho, suave como garúa (*)
miro las nubes grises como mi pelo y sonrío a mi reflejo
un buen momento para recapitular, intento organizar:

Llegando a la adolescencia sentí un impulso místico
“se hará monja” decían las voces y pensé que eso sería
Me alejé de las religiones cuando no hallé respuestas
y, también, por las hormonas que imponen sus órdenes

Luego, se me antojó lo mejor, bregar por la igualdad
por los derechos de todos a recibir sano alimento
tener dignidad, un techo y acceder a una educación
Cuando en una reunión dijeron: “tomen las armas”
sonó una alarma en mi conciencia inmadura…
no era esa la manera de concretar un fin elevado.

Los ideales quedaron atrás después de las decepciones
y llegando mis niños no me dediqué más que a filosofar
a cargar biberones, trabajar y a jugar con mis pequeños:
una etapa bien vivida que me regaló ternura y madurez

Decidí cambiar el Sur por el Norte a ver si encontraba paz
en un país desconocido, que no amaba, al que iba por descarte,
y, después de todo, me dio estabilidad económica, amistad,
allí encontré la espiritualidad que no sabía estaba buscando
Extraño ha de parecer en un país tan metálico, más allí fue
donde lo supe: si quieres cambios, tu actitud has de cambiar.

Crucé el océano hasta que me quedé, aquí, del otro lado
sabiendo que los ideales son papeles que vuelan con el viento
ideología no implica experiencia ni saber, solo se quiere poder
por no poder entrar en razón, por buscar medios para su afán.
Pero de última ni el pobre se beneficia ni el obrero se libera y
el mundo sigue girando en base a números no a corazones.

Miro hacia el pasado, mientras miro llover, buscando sentidos
reviso mi historia y hallo tantos altibajos, aciertos, errores y
pregunto cuántas vidas he de tener para dar fin a lecciones.
Que para templanza he tenido dolores de muchos calibres
las pérdidas no fueron pocas y aún no aprendo, no crezco.
Será por la retribución de agraciada familia, de amistades.

Cosa de vieja mirar para atrás si puedes disfrutar el presente,
La lección requiere esfuerzo: no juzgar, ser incondicional… es
tal vez, el mensaje de la lluvia dando humildemente su ofrenda
sin contar las gotas ni contemplar resultados, sabio chubasco
a veces rocío, diluvio o chaparrón, siempre cae vertical. Hoy
cerraré mi ventana agradeciendo por igual llueva o haga sol.

(*) llovizna
Mónica Ivulich, DR2016Fr.

domingo, 14 de agosto de 2016

ÁRBOL del BESO OLVIDADO


Paseo por el bosque
          tupido de verano
tu recuerdo me sigue
            sin hacer ruido
apenas un crujido de hojas
             imperceptible
apenas roza mi mano
             y huele a fruta
Paso delante del árbol
             del beso olvidado
lo rodeo con mis brazos
             le agradezco 
y, dándome vuelta, recuesto
             mi espalda en él.
Inexplicable: con sol, siento
             lluvia bajo sus hojas.

Mónica Ivulich DR2016Fr.
Foto Adriana Harts